Las Lagunas de Ruidera están compuestas por una sucesión de 15 lagunas situadas a lo largo del curso superior del alto Guadiana. Su formación es consecuencia de la represa de las aguas por parte de las barreras naturales de toba que existen a lo largo del río.
Estas lagunas constituyen un humedal de gran interés limnológico, geomorfológico y florístico. Su originalidad se debe a varios motivos: el origen de las lagunas, la abundancia de especies animales y vegetales, y la calidad de los paisajes lacustres en contraposición con la zona relativamente árida en la que se encuentra.
En su conjunto, el espacio está cubierto por apreciables extensiones de encinar, encinar-sabinar supramediterráneo continental y alguna representación de sabinar albar puro, junto con matorrales dominados por retamares y coscojares.
Este humedal se encuentra declarado espacio natural protegido bajo la figura de parque natural, contando además con un Plan Rector de Uso y Gestión y un plan parcial de uso público. También ocupa el ámbito territorial de la microrreserva Saladar de Pinilla.